En Autoescuela XXX, te desvelamos las técnicas de conducción eficiente, reglas sencillas y muy eficaces , que nos van a permitir reducir hasta un 15% el consumo de carburante, y con ello las emisiones contaminantes, especialmente las de CO2.
Durante nuestras clases teóricas para el Permiso B, las explicamos y durante el desarrollo de las prácticas con el coche las llevaremos a cabo, pero ahí van algunas de las principales técnicas de conducción eficiente:
- Neumáticos.- Antes de sentarte al volante, comprueba el estado de los neumáticos, y controla periódicamente la presión.
- Carga.- Distribuye la carga correctamente en el maletero. Si fuera necesario llevar un cofre portaequipajes ó la vaca, el consumo aumentará.
- Aire acondicionado.- Lo más recomendable es bajar las ventanillas a bajas velocidades y, a partir de los 80 km/h, es preferible circular con la ventana cerrada y el aire acondicionado activado.
- Cómo arrancar. No es necesario calentar el motor ni acelerar. Con motores de gasolina, se puede arrancar e iniciar la marcha inmediatamente Con motores diesel, esperar unos segundos a que se caliente la bujía de arranque. En cualquiera de los casos, saldemos en primera, pero cambiando rápidamente a segunda velocidad.
- Velocidad uniforme. No pegues acelerones ni frenazos bruscos. Mantén la velocidad lo más uniforme posible, evitando frenazos y acelerones, y cambios de velocidad ó de trayectoria innecesarios. Algo tan simple, hará bajar el consumo entre un 2 y un 6%.
- Anticipación. Fundamental para mantener una velocidad uniforme, y redundará en mayor seguridad, al permitir detenerse sin brusquedad– y manteniendo un campo de visión que te permite ver dos o tres coches por delante del tuyo. Cuando detectes un obstáculo o sea necesario una reducción de velocidad, levanta el pie del acelerador y deja rodar el vehículo. Por ejemplo, al divisar un semáforo en rojo, deténgase suavemente utilizando el freno motor y quitando el pie del acelerador.
- Use marchas largas. Es más eficiente circular con marchas largas y bajas revoluciones, aunque debas pisar algo más el acelerador, que en cortas con el acelerador menos pisado. El IDAE recomienda, respetando los límites, incluso en ciudad, usar 4ª y 5ª (6ª en los modernos).
- Decelerar la marcha. Si conduces con anticipación y observas que debes detenerte (por ejemplo, por un semáforo), si levantas el pie del acelerador y dejas la marcha puesta, por encima de 1.200 rpm, el consumo de combustible es nulo. Para frenar, hazlo suave y progresivamente.
- Parar. Detén el coche usando el freno de pie y, siempre que sea posible, sin reducir previamente la marcha.
- Revoluciones.- En el caso de los motores diesel es recomendable moverse entre 1.500 y 2.000 revoluciones, en los gasolina entre 2.000 y 2.500 revoluciones, siempre que se pueda, el cambio de marchas debe ser lo más rápido posible.
- Punto muerto.- Muchos conductores colocan punto muerto en las bajadas. Este concepto es erróneo, ya que en ese momento el motor está desconectado de la caja de cambios pero si va consumiendo. El procedimiento adecuado es utilizar el freno motor, es decir, con la marcha puesta y levantar el pie de acelerador.
Según los cálculos del IDAE – Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energia– , una conducción eficiente puede suponer “el ahorro de hasta un 15% , lo que para un conductor que recorre unos 20.000 kilómetros anuales significa aproximadamente unos 200 euros”
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